Las gambas al ajillo y los champiñones al ajillo, cada uno por su lado, son platos de los más característicos de nuestra gastronomía. Pero …¿y si los juntamos?. Pues resulta un plato buenísimo, rico rico. Se recomienda tener un buen pan a mano para mojar en el aceite.
Qué necesitamos:
Un cuarto kilo de gambas frescas
Cuatro o cinco champiñones frescos
Cuatro guindillas grandecitas
Seis dientes de ajo
Aceite de oliva virgen
Sal
Cómo lo hacemos:
En una sartén echamos aceite y refreímos tres dientes de ajo picaditos, añadimos dos guindillas. Añadimos los champiñones limpios y cortados, salamos y los dejamos hacer.
Aparte en una cazuela de barro o sartén echamos aceite y los ajos y guindllas restantes. Añadimos las gambas peladas y sal, y las dejamos hacer también.
Mezclamos ambos platos y los servimos juntos. A disfrutar…está buenísimo. Y mojad pan en el aceite, que de vez en cuando no importa…son productos sanos y en realidad no engordan.
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